Apenas terminada la declaración del mandatario ruso, las primeras bombas cayeron sobre Ucrania. Y no solo en el oriente del país, sino en regiones como Kiev, Odessa, Kharkiv y Dnipro.
El ejército ruso comenzó la invasión de Ucrania en varios frentes alrededor de las 04:00 a.m. de este jueves 24 de febrero. La ofensiva es deslumbrante ya que a menos de dos horas de la decisión del presidente ruso Vladimir Putin sobre “iniciar una operación militar”, se registraron bombardeos masivos de aviones, misiles de crucero y misiles balísticos, así como tropas terrestres avanzando hacia varias ciudades ucranianas.
Según los informes, el aeropuerto de Chuguyev fue atacado por las fuerzas aéreas rusas y las líneas de defensa de Ucrania bajo la armada militar, podrían ser aniquiladas. Mientras tanto, unidades anfibias se encuentran cerca de la zona de Mariupol, el puerto oriental más grande de Ucrania, así como a lo largo de la costa del Mar de Azov y el Mar Negro.
No obstante, el ministro de Asuntos Exteriores de Kiev, Dmytro Kuleba, hizo un llamado a los países para detener a Vladimir Putin y sostuvo que su país “se defenderá” de los ataques.
Por otro lado, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, señaló que: «Este es el momento más triste de mi mandato en la ONU». Además, envió un mensaje al mandatario ruso, suplicando que: «¡Presidente Putin, en nombre de la humanidad, traiga sus tropas de regreso a Rusia! Este conflicto debe terminar ahora».
Hasta el cierre de esta nota, las alarmas distribuidas en territorio ucraniano se encuentran sonando como señal para que los ciudadanos se pongan a buen respaldo ante un posible ataque de militares rusos.