Para disfrutar de la disminución del calor la población tendrá que esperar hasta el inicio del fin de semana
Una ola de calor sigue afectando a la población italiana, que durante todo el periodo de verano ha tenido que soportar temperaturas de hasta 40°C durante el día. Esta situación ha puesto en alerta roja a 16 regiones del país: Bolonia, Bolzano, Brescia, Florencia, Frosinone, Génova, Latina, Milán, Nápoles, Palermo, Perugia, Rieti, Roma, Turín, Trieste y Verona.
La alerta detalla temperaturas de hasta 45 grados en Génova como consecuencia de la alta humedad, mientras que en Torino se espera un aproximado de 42 grados. Un ligero suspiro de calor beneficiará a la población en 9 ciudades: Ancona, Bari, Cagliari, Campobasso, Catania, Civitavecchia, Messina, Pescara y Reggio Calabria que se encuentran actualmente en alerta amarilla.
Mientras tanto, según lo detectado por la estación de radiosonda de Novara Cameri, se ha hallado un nuevo récord de congelación a una altitud de 5.328 metros. Así mismo, en el Valle de Aosta a casi 900m de altitud, donde la sensación térmica señala picos de hasta 39°.
Por otra parte, los meteorólogos piden atención a la ola de mal tiempo que seguirá posterior al calor: después de la jornada de mañana, las primeras tormentas iniciarán desde los Alpes y pre – Alpes para luego extenderse hacia la llanura donde las tormentas también pueden ser violentas y asociadas a granizo.
La disminución del calor se sentirá durante el fin de semana debido al cambio de clima que iniciará en el norte, y entre el 28 y 30 de agosto en el centro sur del país.