Si un empleador intenta imponer peores condiciones a sus empleados bajo amenaza de despido, podría tratarse de un caso de extorsión
Dentro del mundo laboral, la legislación italiana protege los derechos de sus empleados contra cualquier forma de explotación o abuso por parte de sus empleadores. A continuación, cuándo denunciar el chantaje del empleador o cuándo el empleador puede ser acusado por extorsión a la policía.
Existen tres posibilidades que pondrían al empleador en riesgo de ser acusado, entre ellas se encuentran:
- Extorsión mediante amenazas de cambio de contrato: Este delito se produce cuando un empleador, con el fin de obligar a sus empleados a aceptar cambios desfavorables dentro de sus condiciones de contrato previamente pactadas, amenaza al trabajador con la posibilidad de interrumpir la relación laboral.
- Extorsión mediante tratamientos salariales engañosos: Esto ocurre cuando el empleador induce a los trabajadores a firmar documentos que certifican el pago de salarios superiores a los realmente percibidos.
- Extorsión mediante condiciones laborales ilegales: En este caso, la conducta del empleador se refleja en el beneficio obtenido por servicios no remunerados y en la impropiedad del despido, el cuál está permeado por una causa jurídicamente injusta.
Estos tres casos suelen ser los más frecuentes dentro de un centro de labores, por lo cual la legislación italiana protege los derechos del trabajador frente a este tipo de comportamientos por parte de los empleadores. Para evitar consecuencias legales graves, es importante que tanto el empleado como el empleador conozcan y cumplan con las leyes laborales en Italia.