Las personas que trabajan a domicilio y no están cubiertas por otros seguros están obligadas a contratar un seguro de accidentes domésticos
De acuerdo con la legislación actual, las personas que cumplen labores dentro de un domicilio y no están cubiertas por otros seguros están obligadas a contratar un seguro de accidentes doméstico. Este seguro reconoce la protección a todos aquellos que realicen, de forma gratuita y sin limitación de la subordinación, una actividad encaminada al cuidado de miembros de familia y del medio en que conviven de forma habitual y exclusiva.
Quienes están obligados a contratar el seguro de accidentes domésticos son:
- Estudiantes: que estudien y viven en un algún lugar distinto a la ciudad de residencia y que cuiden el entorno en el que viven.
- Todos aquellos que, habiendo cumplido los 18 años, trabajen exclusivamente en el hogar para el cuidado de familiares.
- Pensionistas que no hayan superado los 67 años.
- Ciudadanos extranjeros que residen legalmente en Italia y no tienen otra ocupación.
- Trabajadores en tránsito, los trabajadores de las cajas de cesantía o los beneficiarios de servicios con cargo del Fondi di integrazione salariale y los trabajadores que perciban las prestaciones por desempleo previstas por leyes vigentes a raíz de la perdida involuntaria del empleo.
- Personas que realizan una actividad laboral que no cubra todo el año.
El importe es de 24 euros y se puede pagar a través de la web del INAIL, Poste Italiane o los bancos. Asimismo, la diligencia se puede realizar físicamente o en las oficinas de correos, bancos, casas de apuestas, estancos y supermercados autorizados. El usuario debe tener en cuenta que para las personas físicas con una renta personal brutal de hasta 4.648,11 euros anuales o quienes pertenezcan a un núcleo familiar cuya renta bruta total no supere los 9.296,22 euros anuales, la prima la paga el Estado.