Argentina ha estado luchando contra la inflación durante años con poco éxito. Eso ha empeorado a medida que los precios mundiales de las materias primas han subido durante el último año.
Según a las autoridades de Argentina, el precio de la gasolina alcanzó los 114.333 pesos argentinos (1.001 dólares) su valor por litro, cuando en enero costaba 96.52 pesos argentinos (0.86 dólares).
De igual manera, el alza de los productos básicos de la canasta familiar viene adquiriendo nuevos costos. Bebidas y granos como la leche, el arroz y el pan, se proyectaron entre $1.02, $1.03 y $1.25 respectivamente durante el inicio de la semana.
A esta subida en los artículos claves para los argentinos, se les suma el incremento en los precios de la educación, que hoy contabiliza un 23,6% más. Al igual que la vestimenta con un 10,9% adicional y los gastos que genera la vivienda, agua, luz y gas, ascendiendo a un 7,7%. Así lo dieron a conocer desde el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC Argentina).
Además, indicaron que la tasa de inflación de Argentina alcanzó el 6,7% en marzo, siendo la cifra más alta durante los últimos 20 años, pues, solo en el primer trimestre del 2022, los precios han subido un 16,1%.
Protestas
Los datos de la INDEC se publicaron apenas unas horas después de que se llevaran a cabo manifestaciones callejeras en el país sudamericano, especialmente en la capital, Buenos Aires, donde los ciudadanos exigían más ayuda del Gobierno, mayor empleos y alimentos.
Como reflejo del creciente descontento social, miles de manifestantes marcharon hacia la Casa Rosada, pidiendo al presidente Alberto Fernández que cree empleos y amplíe la asistencia estatal. Los protestantes se congregaron en la histórica Plaza de Mayo con pancartas exigiendo «trabajo de verdad» y mayor apoyo a los comedores populares, entre otras ayudas.
Mario Almada, un albañil de 60 años que asistió a la marcha indicaba que: «La cosa pinta mal, la economía se le va de las manos a este gobierno». Además, señaló que sus ingresos mensuales y junto al subsidio que recibe del Ejecutivo «no son suficientes para comprar alimentos».
Almada recibe alrededor de 16 mil pesos al mes (136 dólares) vía asistencia social, pero indicó que, en su localidad de Florencio Varela (sur de Buenos Aires), «el dinero se va como el agua».
«Esto empieza a parecerse un poco a la época de (el expresidente Raúl) Alfonsín» en la década de 1980, agregó, citando un período de turbulencia económica que condujo a una crisis con hiperinflación.
Finalmente, los expertos predicen que la inflación de Argentina llegará a casi el 60% este año, generando un alto costo para los argentinos, pues, casi el 40% de ellos ya viven en la pobreza.