A partir de octubre, las facturas de gas llegarán mensualmente y ya no cada dos meses. Así lo decidió la Arera, la Autoridad de Energía, para las familias que aún acceden al mercado protegido. La decisión está diseñada para que los clientes puedan conocer con mayor frecuencia sus gastos y redistribuir el pago de las facturas a lo largo de varios meses.
Se trata de 7,3 millones de clientes domésticos, equivalentes a más de un tercio del total de 20,4 millones, quienes pagarán sus recibos cada mes a partir de octubre. Este grupo de personas abarca a aquellas que no han firmado contratos en el mercado libre pero que aún se encuentran en condiciones de protección. Los demás seguirán pagando el gas en función de la periodicidad (dos meses o uno) que establezcan sus respectivos contratos.
Otro novedad es que el coste del material ya no se calculará sobre la base de los precio del mercado mayorista internacional, es decir, el TTF holandés (Title Transfer Facility), sino sobre la media de los precios reales del mercado mayorista italiano PSV (Virtual Trading Point), el principal centro italiano donde se realizan las operaciones de intercambio de gas.
La lógica detrás de esta medida es que la desvinculación del mercado de Ámsterdam, como se indica en la nota publicada por Arera, permitirá a la autoridad «transferir rápidamente a los clientes el beneficio de cualquier iniciativa europea para contener los precios de las materias primas energéticas».
Una reacción muy positiva provino de las asociaciones de consumidores en Italia. Por ejemplo, la Unión Nacional de Consumidores (UNC) saludó la medida de la Arera. “Ahora se podrá tener facturas mensuales, en lugar de bimestrales, también en el mercado de gas protegido. Un avance muy importante para evitar facturas insostenibles para las familias o posibles ajustes exagerados”, afirmó Marco Vignola, jefe del sector de energía de la UNC.