En Italia los casos por COVID-19 han comenzado a repuntar de manera drástica. Hasta el momento se ha registrado una cifra de cerca de los 78 mil contagiados. Todo esto debido a la rápida propagación de la variante Ómicron.
En ese sentido, el Consejo de Ministros está viendo la posibilidad de introducir el Super green pass para trabajadores del sector público. Además, de proponer la obligatoriedad de la vacuna contra la COVID-19. Ambas opciones serán revisadas el día de hoy por Mario Draghi, Presidente del Consejo de Ministros.
Por su parte, el ministro Renato Brunetta ha mencionado que con los nuevos casos se buscará aplicar el Super green pass a todo el mundo laboral. Además, se busca el bloqueo de las personas no vacunadas.
Super Green Pass
Esta versión mejorada del Green Pass excluye el uso del tampone, la cual solo se puede obtener con vacuna o curación, es ya obligatoria para decenas de actividades. El ampliar su uso para todos los lugares de trabajo tendría un impacto en al menos 25 millones de empleados y autónomos. Sin embargo, gran parte de estos ya está vacunada. Recordemos que este pase se obtiene al haber finalizado el ciclo de vacunación primaria, es decir, con la segunda dosis o que estén recuperadas.